LA AYUDA A LOS GANADEROS ES UN PARCHE INSUFICIENTE

La comisaría de Agricultura europea, Mariann Fischer Boel, propone 280 millones de euros para ayudar al sector ganadero en el 2010.

Desde el Frente Nacional consideramos esta medida un absurdo y un parche para calmar el malestar de los ganaderos. Estos 280 millones no resuelven el problema de un sector en peligro de extinción en Europa como es el ganadero. Si a esto añadimos que España recibirá la ridícula cifra de 12 millones de euros podemos decir que es una sentencia de muerte para el sector ganadero.

Los ganaderos no quieren ni caridad ni limosnas, lo que quieren es vender sus productos a precios que les permitan vivir con dignidad de su trabajo y así poder garantizar un futuro para sus hijos, algo que en nombre del ultraliberalismo les niega la Unión Europea

ABUSIVO AFAN RECAUDATORIO DE LA CONSEJERIA DE PESCA

El Frente Nacional considera abusivo que los pescadores cántabros tengan que pagar una nueva tasa para poder acceder a la petición de cotos para el ejercicio de la pesca.
La cantidad de 5 euros sólo por presentar la solicitud para peticionar, después hay que pagar el coto o cotos peticionados y la licencia.

El problema radica , sobre todo, en que la Conserjería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Biodiversidad se preocupa exclusivamente en recaudar cada vez más dinero, sin poner ningún tipo de solución a los problemas que tiene el sector. La pesca continental tiene problemas muy importantes a los que hay que dar solución, como es la contaminación de los ríos y la degradación de los mismos por las obras realizadas en sus cursos. Se encauzan tramos de ríos sin ningún tipo de sentido funcional, realizando verdaderos delitos ecológicos como el realizado en el río Pas, del cual todavía no se sabe quién es el responsable; tampoco se conoce el responsable del vertido en el río Besaya con la perdida de miles de peces, en un lugar ya de por si muy castigado por la contaminación y que se estaba recuperando, eso sí, no gracias a la conserjería, que de lo que sí se preocupa es de dar una gran cantidad de dinero a una empresa para que haga el recuento de peces que hay en el Pantano del Ebro, de los cuales el 95% no son autóctonos, asó como de subir cada año los precios y presentar unas órdenes de vedas cada vez más restrictivas que van en perjuicio del pescador y que no benefician en nada a nuestros ríos.