
Rechazamos, a su vez, de plano la cobardía de la clase política, tanto del Gobierno como de la oposición, dispuestos a mirar hacia otro lado ante un posible mal uso de dinero público, motivo suficiente para que los hechos dejen de ser una mera cuestión interna de la asociación. Del mismo modo actuaron en el asunto CES, que se habría saldado con una dimisión sin más de no haber acudido el Frente Nacional a la Fiscalía para llegar al fondo de las responsabilidades a las que haya lugar.