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REVILLA DEBE ACTUAR CONSECUENTEMENTE ANTE EL PROBLEMA QUE CREÓ EN CASTRO URDIALES

Hasta tal punto es responsable que para "vender" a Muguruza lo equiparó a sí mismo. No sólo destacó su incorruptible personalidad, sino que la garantizó apostando sus dos manos para demostrar la confianza total y absoluta que tenía en el paladín de la honradez y que hoy no da abasto a acumular demandas.
Miguel Angel Revilla sólo tiene dos salidas dignas, una es presentarse en Diputación con las manos amputadas, que no va a ser, y otra, dimitir irrevocablemente porque es indigno que un presidente haga de la mentira su modo de sobrevivir en política; y a Revilla ya le han "pillado" muchas veces.
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