El Frente Nacional ha presentado reclamación contra el Reglamento del Consejo de Inmigración aprobado en primera instancia en pleno el día 24 de febrero.El Frente Nacional entiende que la política de inmigración del Consistorio santanderino es un disparate que le cuesta mucho dinero a los santanderinos, en una época donde la ciudad tiene otras necesidades más perentorias. A nuestro juicio, el Ayuntamiento pretende influir en la vida diaria y costumbres de los santanderinos para dirigirles en una determinada dirección; dirección que, por otra parte, ha resultado un fracaso en los principales países europeos, como así han reconocido públicamente los dirigentes de Alemania, Francia o Reino Unido. El Ayuntamiento de Santander pretende descargar el peso de la integración sobre los hombros de los santanderinos, intentando asegurarse, por otro lado, un buen vivero de votos.
Para el Frente Nacional la Comisión de Inmigración es un organismo prescindible, ya que las aspiraciones de los colectivos inmigrantes pueden canalizarse, como las del resto de los ciudadanos, a través del Derecho de Petición, tal como viene recogido en la Ley Orgánica 4/2001. Del mismo modo, los casos de racismo y xenofobia deben ser llevados ante la Justicia, como delitos tipificados en el Código Penal, en lugar de a un organismo meramente consultivo y sin capacidad ejecutiva.
Por todo ello, el Frente Nacional ha pedido la retirada de dicho Reglamento y la eliminación de dicho Consejo.
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